En España, estos motivos han llevado a muchas empresas a abrirse a nuevos mercados y a gestionar las operaciones de Cross Trade en otros países para facilitar el comercio internacional de contenedores marítimos.
Este tipo de operaciones también son conocidas como cruzadas o triangulares y son aquellas en las que las empresas que se encargan de la compra-venta de las mercancías, artículos y productos también se encargan de coordinar el transporte de la mercancía directamente desde el país de origen al de destino.
El Cross Trade tiene como ventaja que se reducen los costes del transporte al gestionar la misma empresa los movimientos de la mercancía por contenedor marítimo u otro tipo de transporte. Además también se reducen los gastos en impuestos y el tiempo.
Sin embargo presenta un inconveniente y es que requiere un importante trabajo documental y de gestión para estas empresas ya que generalmente, los importadores y los exportadores no se conocen.